Redacción Pediatría y Familia
Hoy en día los especialistas aconsejan a los padres a no alimentar a sus hijos con comida de sal antes de los 6 meses, ya que estos primeros seis meses en la vida del niño son exclusivos para la lactancia o alimentación con leche de fórmula. Dicha medida se establece para garantizar la salud del bebé y no provocar problemas gastrointestinales en el pequeño.
Después de los seis meses, la nutrición del bebé debe cambiar paulatinamente. Para este momento, el pequeño debe comenzar con las primeras tomas de agua y con el proceso de recibir diferentes alimentos. Sin embargo, en padres primerizos este proceso natural genera varias preguntas a los padres primerizos siendo las más comunes: ¿Cuáles son los alimentos que le puedo empezar a dar?, ¿de qué manera se pueden preparar? y ¿cual es la cantidad necesaria para darles?
A partir de los seis meses, el niño ya cuenta con una madurez fisiológica y neurológica suficiente para recibir, digerir y probar otros alimentos que también aportan nutrientes a su proceso de crecimiento y desarrollo. Una variedad nutricional ayudará a que el niño se mantenga en perfecto estado de salud y evita que sea propenso a diferentes enfermedades, sin importar si son leves o graves.
La alimentación complementaria según la investigación y los conocimientos del Centro de Estudios Sobre la Nutrición Infantil (CESNI) de Argentina, se define como “una alimentación infantil complementaria de buena calidad es aquella que en forma concomitante a una lactancia exitosa es iniciada oportunamente, en la cantidad y ritmo de progresión apropiados para satisfacer las demandas del crecimiento”.
Consejos para alimentar al bebé desde los 6 meses.
- El niño debe tener sus propios implementos a las hora de comer como: taza, vaso y cuchara. Si es posible él debe tener su propia silla.
- Darle la comida es muy importante, por eso se debe escoger las mejores horas del día para dedicarle tiempo, paciencia y tranquilidad.
- Averigua cuáles son los alimentos que más le agradan, es normal que empiece a rechazar lo que su paladar no le agrada.
- Prepara purés: El puré debe estar preparado lo más suave posible y se puede realizar puré con diferente alimentos tales como: papa, polenta, fideítos en su mejor cocción. también se pueden combinar diferentes alimentos como la zanahoria, frutas como la manzana, banana, durazno y peras no es necesario agregar sal ni azúcar.