La Enterocolitis Necrotizante (NEC) es una enfermedad grave que afecta a los recién nacidos, especialmente a los prematuros. Se presenta como una inflamación en distintas localizaciones del intestino que causa destrucción -necrosis- del tejido.
Como una visión general, la NEC se debe principalmente a una interacción de distintos factores como son la inmadurez intestinal e inmunológica de los recién nacidos prematuros, asociada a infecciones, el uso de antibióticos, transfusiones sanguíneas y la alimentación con fórmulas lácteas. Se conoce de forma amplia que, en esta población, no existe una microbiota intestinal establecida, es decir, las bacterias que viven normalmente en los intestinos de las personas, en ellos aún no se ha desarrollado completamente, por lo tanto, el crecimiento de microorganismos dañinos se hace más fácil, aumentando el riesgo de padecer de NEC. Es por esto que, en los últimos años, un creciente número de pediatras han recomendado la suplementación con probióticos (bacterias que aportan beneficios para los organismos) basados en los estudios que los asocian a un menor riesgo de NEC, sepsis y una reducción en la tasa de mortalidad.
Por otra parte, unas células especializadas presentes en el intestino se encargan de secretar un anticuerpo llamado Inmuglobulina A (IgA), es decir, una proteína que tiene como función defendernos de infecciones. Se ha observado que los bebés prematuros presentan niveles bajos de IgA en comparación con bebés maduros. Basado en esto, estudios sugieren que la leche materna por su alto contenido de IgA, juega un papel importante en la prevención de enfermedades como la NEC, al suplir la escasez de producción de IgA por parte de los intestinos en desarrollo del recién nacido prematuro.
No obstante, la Enterocolitis necrotizante aún es una enfermedad que requiere de avances en el tema de prevención y tratamiento. Expertos aseguran que son múltiples las enfermedades en recién nacidos que aún se encuentran bajo la clasificación de “Enterocolitis necrotizante” pese a sus diferencias en presentación clínica y opciones de tratamiento, por lo que el principal propósito de las investigaciones futuras es lograr una mejor caracterización de la enfermedad y así, mejorar su abordaje.
