Al nacer un bebé, casi de inmediato, se cree que su alimento será la leche materna. La emoción de darle la bienvenida al mundo a un niño, opaca otras posibles dificultades. Entre ellas, la lactancia. Como no todos los bebés están en condiciones de iniciar este proceso o se les dificulta, se crearon los bancos de leche como alternativa.
Los bancos de leche son centros especializados en el que se almacena leche materna, obtenida a través de la madre del bebé que no puede o no logra alimentarse o de madres nodrizas en perfecto estado de salud. Dichos centros están equipados con todos los implementos para recolectar, almacenar y distribuir la leche materna que reciben.
El propósito de los bancos de leche es llegar a los neonatos y bebés que necesitan de leche materna pero que no pueden recibirla por causas variadas, siendo las más comunes la hospitalización o la producción insuficiente de leche de su mamá. Para que un bebé pueda recibir leche materna proveniente de estos bancos, es indispensable la prescripción médica. Usualmente, los pediatras la recomiendan para los bebés prematuros o que pesen menos de 1.500 gramos.
¿Esta es una alternativa segura?
La respuesta es SÍ. Los bancos que reciben leche en donación deben cumplir con estrictos protocolos de seguridad. La leche materna que se recibe se analiza en busca de virus e infecciones para prevenir el contagio de cualquier enfermedad y garantizarle al bebé que la recibe, una alimentación altamente nutritiva.
Dentro de este protocolo de análisis, a las muestras de leche se les hace un estudio de macronutrientes para revisar su composición. Esta prueba se realiza para saber en qué momento es más alimenticia la muestra, pues se ha demostrado que ciertos nutrientes de la leche materna son más efectivos en horas concretas del día.
Cuando la muestra de leche pasa las pruebas necesarias se congela, etiqueta y almacena. Así su distribución es más rápida y efectiva.
Por desgracia, en Puerto Rico y otros países de Latinoamérica esta es una alternativa todavía inaccesible. Sin embargo, de acuerdo con la partera Rita Aparicio, en círculos sociales de mujeres muy cercanas entre sí, se realizan donaciones de leche materna sin ningún costo cuando son situaciones extremas.
Según la OMS, ningún niño debería ser alimentado con leche de fórmula. Por ese motivo, la organización promueve la creación de bancos de leche y la distribución de leche materna, el mejor alimento que puede recibir un infante.
