Clasificación del asma infantil según su origen, intensidad y severidad.
De la misma manera que ocurre con otras enfermedades, no hay solo un tipo de asma. Dependiendo del desencadenante, el cómo y cuándo ocurre la crisis de asma, el tratamiento del mismo puede variar. El asma bronquial admite varios tipos de clasificaciones. Así se pueden distinguir distintos tipos de asma infantil en función del nivel de control, de los factores desencadenantes, y de la gravedad y frecuencia con la que aparece.
En función del grado de obstrucción de las vías respiratorias (medido con espirometría), y de la gravedad o severidad, y frecuencia de presentación de los síntomas, el asma infantil admite la siguiente clasificación.
En el asma leve, las crisis aparecen con una frecuencia no superior a 1 o 2 por semana, no existe interrupción del sueño nocturno, en los periodos intercrisis (como su nombre indica, son los periodos de tiempo que transcurren de una crisis a otra) el paciente está asintomático y existe buena tolerancia al ejercicio físico.
La espirometría suele ser normal o con una obstrucción mínima. Las crisis asmáticas suelen responder en menos de 24 horas únicamente utilizando broncodilatadores. El asma leve se divide a su vez en dos subgrupos: leve intermitente ( son criss puntuales) o leve persistente (los síntomas son frecuentes).
Estos pacientes precisan con frecuencia un tratamiento antiinflamatorio de base, acompañados en las crisis asmáticas del uso regular de broncodilatadores. En el caso de que las crisis sean graves, es posible la necesidad de corticoides sistémicos. Las crisis aparecen con una frecuencia superior a 1 o 2 por semana. Pueden surgir crisis asmáticas graves aunque son poco frecuentes.
La necesidad de tratamiento médico urgente es inferior a 3 veces al año. Puede aparecer asma nocturna 2 o 3 veces por semana, con repercusión en la vida escolar y en los periodos intercrisis el niño puede presentar tos seca y pitos con frecuencia, y la tolerancia al ejercicio físico está disminuida. La espirometría presenta un patrón obstructivo claro y la respuesta de los bronquios después de la administración de un broncodilatador es positiva.
Estos pacientes precisan tratamiento de continuo y asociando diversos fármacos: brocodilatadores + corticoides sistémicos o inhalados a dosis elevadas + antileucotrienos. Las crisis aparecen con mucha frecuencia y suelen ser crisis asmáticas graves. Los pitidos en el tórax o sibilancias suelen aparecer a diario. La necesidad de tratamiento médico urgente es de más de 3 veces al año. En algunos casos, estas crisis van acompañadas de insuficiencia respiratoria e incluso respiración asistida.
En los periodos intercrisis, el niño presenta tos seca y pitos continuos, con muy mala tolerancia al ejercicio físico, con interrupción casi diaria del sueño nocturno y opresión torácica al despertar por las mañanas. La vida escolar se ve claramente afectada y la espirometría presenta un patrón obstructivo claro. Si los síntomas del niño empeoran con el tiempo y aparecen con regularidad, no dejes de consultar a su pediatra.
Basándonos en el origen de la enfermedad o en los factores desencadenantes, el asma infantil puede ser:
1. Asma extrínseca
Se denomina también asma alérgica e incluye el asma por inhalantes (pólenes, ácaros, animales, hongos y agentes ocupacionales) y las crisis de asma por alimentos, medicamentos e himenópteros. El asma alérgica puede, a su vez, dividirse en estacional y perenne.
2. Asma intrínseca
Recoge el resto de los casos en los que no es posible identificar una causa alérgica. El asma asociado a procesos infecciosos, el inducido por la existencia de reflujo gastroesofágico o el que se manifiesta por la inhalación mantenida de vapores irritantes son algunos ejemplos. Entre ellos están:
Para tratar los síntomas del asma en los niños es necesario conocer los tipos de asma que pueden padecer. Para cada tipo de asma hay síntomas diferentes:
Guía Infantil | Marisol Nuevo