Marta Ivelisse Vélez |
Redactora de Pediatría y Medicina de Familia |
“”””El sentido del olfato juega un papel importante en el desarrollo de los bebés y está muy relacionado con el sentido del gusto, por lo que debemos entender que este influye en lo que a tu bebé le gusta comer. Además, el olfato tiene que ver con las emociones de tu bebé y juega un rol fundamental en el apego entre madre e hijo.
Tu bebé empieza a usar el sentido del olfato desde el útero y se familiariza poco a poco con el olor del líquido amniótico cuando lo respira y traga. Eso es útil, porque el olor es similar al de la leche materna que necesitará en cuanto nazca. El líquido amniótico también lleva el aroma y sabores de la comida que consumes, así que el olor de ese sándwich de tocino que comiste estando embarazada, lo compartiste con tu bebé.
El sentido del olfato de un bebé recién nacido es muy sensible. Si bien no puede reconocerte con la vista, te conocerá por tu aroma natural, el cual será su olor favorito. También sentirá atracción por el aroma de tu leche materna. Esos olores están relacionados directamente con sus necesidades básicas de alimentación y conforte.
El sentido del olfato se procesa en la parte del cerebro que controla también la memoria. Así tu bebé hace asociaciones mentales entre aromas en particular y las experiencias que ha tenido al olerlos. Esto significa que, incluso años después, un aroma puede disparar un recuerdo en la memoria de tu bebé y recordarle un momento o sentimiento en particular de su pasado.
¿Cómo se desarrolla el sentido del olfato de mi bebé?
Al nacer
Tu recién nacido está familiarizado con tu olor personal, que es único. Puede distinguir entre el olor de tu leche materna y el de la leche de otra madre. Al reconocer tu olor, tu bebé se siente seguro y cómodo porque sabe que está contigo. Puedes ayudarlo tratando de no usar perfume o productos perfumados en los primeros días.
Cuando abraces a tu bebé y se huelan mutuamente, ambos tendrán un aumento en el nivel de la hormona oxitocina, conocida como la hormona del amor, que ayuda a fomentar el apego con tu bebé.
Al mes
Tu bebé se empieza a acostumbrar a diferentes olores, pero los olores fuertes aún le podrían afectar. De hecho, un aroma demasiado fuerte podría interferir con su sentido del gusto. Si te pones un perfume fuerte, quizá no se alimente tan bien como de costumbre.
A los 3 meses
A esta edad, tu bebé se vuelve más consciente de la gente que lo rodea en general. Seguirá usando el sentido del olfato para distinguir entre las personas que conoce y los extraños. Si se siente asustado o amenazado por el olor de una persona, llorará o pateará.
A los 6 meses
Cuando introduzcas alimentos sólidos a la dieta de tu bebé, tu pequeño usará el gusto y el olfato para decidir si la comida que le presentas le gusta o no. Si le gusta el aroma que viene de la cocina, podría reaccionar sonriendo, señalando o haciendo ruidos.
A los 12 meses
Para los 10 meses tu bebé podría mostrar menos entusiasmo en probar diferentes alimentos. Su sentido del olfato le ayuda a diferenciar lo que le gusta de lo que no. Si no le gusta el olor de la comida que le das, seguro que te lo hará saber.
El sentido del olfato de tu bebé continuará desarrollándose hasta los 8 años de edad, más o menos.
¿Algunos olores podrían calmar a mi bebé?
Sí, los olores que le son familiares, especialmente el de mamá o papá, pueden ser muy tranquilizantes para tu bebé.
De la misma forma que el olfato le dice si está cerca de ti, también lo ayuda a identificar si está en el auto o en alguna habitación de la casa en particular. Si tu bebé está exaltado, es posible que llevarlo a un lugar donde se sienta cómodo y con olores que le sean familiares lo tranquilice.
Esa cobijita o peluche que tu bebé no suelta por nada también ha adquirido un olor especial que lo hace sentir cómodo y seguro. Es por eso que se molesta si lo lavas, ¡le quitas el olor!, aunque tú sepas que necesitaba esa lavada más que nada.
Los aromas de los remedios naturales, como los aceites esenciales de aromaterapia, también podrían tranquilizar a tu bebé. Un estudio encontró que los bebés con cólico respondieron bien al masaje con aceite de lavanda y se mostraron relajados. Sin embargo no quedó claro en el estudio si el alivio vino del aceite o del masaje.
Otro estudio encontró que la aromaterapia de lavanda y aceite de almendras dulces redujo el estrés en bebés prematuros.
Es importante tener cuidado al usar aceites esenciales en bebés y no aplicarlos directamente sobre su piel. Algunos podrían ser dañinos, y los niños con piel extra sensible podrían sufrir efectos secundarios. Consulta a un especialista en aromaterapia.
Una alternativa es poner unas cuantas gotas de la esencia en un difusor lejos del alcance de tu bebé. El aroma del aceite se liberará por la casa. Prueba diferentes aromas para identificar a cuáles responde mejor tu bebé.
Marta Ivelisse VélezRedactora de Pediatría y Medicina de Familia |