Bebés prematuros: cuidados necesarios

1,140

Uno de cada diez recién nacidos en el mundo, es prematuro, es decir, nacido antes de completar 37 semanas de embarazo. Los últimos meses del periodo de gestación podríamos llamarlos los más importantes para el desarrollo del bebé. Cuando un niño nace antes de tiempo, pesa y mide mucho menos que un niño nacido a término.

Desafortunadamente, este déficit en el desarrollo hace a los niños más propensos a sufrir problemas respiratorios, auditivos y de la visión. Además, aumenta el riesgo de padecer dificultades para akimentarse, parálisis cerebal y un retraso en el desarrollo cognitivo, de ahí la importancia de que los niños reciban una atención médica especializada.

Después del nacimiento

Luego del alumbramiento, el bebé es trasladado a la sala de recién nacidos de atención especial. Puede ser un momento doloroso, pero debes tener en cuenta que el nacimiento prematuro es en muchas ocasiones la mejor opción para ti, y para tu bebé.

  • Es cierto que en un principio se limite el tiempo que puedes compartir con el pequeño, pero no permites que te lo nieguen por completo. Muchas unidades de cuidados incentivos permiten que las madres utilicen el método canguro cuando ya no dependan directamente de un apoyo respiratorio o cardíaco.
  • Aliméntalo siempre que el médico lo apruebe. Las enfermeras brindan las instrucciones clave sobre las técnicas de alimentación con el pecho o con biberón, esto depende de la condición en la que se encuentre el niño y, de alguna manera, con lo que tú te sientas más cómoda.
  • Lo más probable, es que la alta te la den primero a ti que a tu bebé, por lo que debes estar preparada para esta separación. Debes ser consciente que el niño requiere de supervisión médica permanente, y hasta que los médicos digan lo contrario, en mejores manos no pueden estar.
  • Debes mantener un contacto frecuente de piel con piel con el bebé, de manera que acarícialo, tócalo y cárgalo en la medida en que el profesional de la salud lo apruebe. Es un punto fundamental tanto para el bebé, como para ti al crear y fortalecer este vínculo.

Puedes informarte más del tema con tu médico de cabecera, quien estará en toda la disposición de resolverte las inquietudes que te surjan. Lo que sí debes saber desde el principio, es que es una transición, un proceso del cual el bebé saldrá victorioso.

¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 0 Promedio: 0)
Cargue Artículos Más Relacionados

Mira además

Beneficios de la siesta en los bebés

La siesta del bebé puede ser un momento de descanso para ti y tu pequeño, pero hacer que e…