Según una investigación realizada como parte del proyecto ‘Human Early Exposome’ (HELIX), el cual actualmente se lleva a cabo en Guipúzcoa, Sabadell, y Valencia, un mayor contacto de las mujeres embarazadas con la naturaleza y espacios verdes reduce el riesgo de bajo peso en el bebé y en general, beneficiaría a la salud de los nacidos.
Objetivo de la investigación
El objetivo de la iniciativa es dar a conocer y describir la exposición que hay durante el inicio de la vida en múltiples factores ambientales y hallar una relación con la salud de los niños.
Para esto, los investigadores se centraron en analizar el exposoma, la suma total de la exposición ambiental desde el momento de la concepción.
Esta tesis pretende aportar una visión holística de la exposición ambiental y sus efectos en la salud humana, evaluando diversas exposiciones y contacto simultáneamente durante periodos críticos de la vida.
Estudios anteriores ya habían dado a conocer asociaciones negativas entre peso de nacimiento y la exposición ambiental, por ejemplo, exposición con el aire contaminado, temperatura, la falta de espacios verdes, o vivir en barrios con circunstancias desfavorables.
Ante esto, esta nueva investigación analizó la relación entre el exposoma urbano que incluye, aire contaminado, ruido del tráfico, espacios naturales, entre otros, con el bajo peso de nacimiento y bajo peso de nacimiento a cabo. Lo que dio como resultado asociaciones positivas y significativas a la exposición ambiental.
