Si eres una mamá, un papá o un abuelo actualizado, no se te hará extraño compartir fotos de los pequeños de tu familia. En el mundo actual, las redes sociales son un espacio que permite acortar distancias, mantenerse en contacto y crear nuevas amistades. Sin embargo, esto no quiere decir que estén exentas de peligro y mucho menos, los niños a los que quieres dar a conocer.
Un estudio de McAfee reveló que un 30% de padres publica imágenes de sus hijos en Internet al menos un día a la semana. Y que 1 de cada 10 lo hace más de 4 veces al día. Aunque pueden tener buenas intenciones, un 71% de los padres encuestados conocen y aceptan los riesgos a los que exponen a sus bebés o niños en redes sociales. Aún así, no creen que sea algo que pueda afectarlos directamente.
“Si las imágenes compartidas caen en manos equivocadas, se puede llegar a sustraer información sensible como la fecha de nacimiento, domicilio, colegio o incluso el nombre completo del niño”, señala Francisco Sancho, product manager consumer y mobile de McAfee.
Algunos especialistas coinciden en que los padres del siglo XXI no tiene en cuenta la futura opinión de su hijo. El ser expuesto a través de las redes sociales no siempre es bien visto. De hecho, una fotografía que se haga pública incluso puede provocar bullying y aislamiento que pueden traducirse en depresión y ansiedad para los niños de mayor edad.
Si bien el 70% de padres hace este tipo de publicaciones en sus redes privadas, no creen que tenga efectos negativos sobre la salud psicológica de sus hijos.