“Las mujeres que han estado en estado de gestación, han experimentado un crecimiento e hinchazón en los pies después del embarazo“. Así lo comprobó una investigación realizada por la Universidad de Iowa, cuyos investigadores afirman que tras un período de gestación, el cuerpo sufre cambios constantes estructurales.
Por ello, es probable que como crecen otras áreas del cuerpo, también lo hagan los pies.
“Los pies se inflaman principalmente por la retención de líquidos que se presenta durante el embarazo”.
Aunque las causas se asocian a la acumulación de líquido en los tejidos, el origen principal de este signo se deriva de problemas circulatorios, insuficiencia cardíaca congestiva y enfermedades renales o hepáticas.
“Sin embargo, la hinchazón en los pies se considera una patología cuando la causa es la dilatación de las venas ante un cambio de temperatura”.
Los encargados del estudio, midieron los pies de varias mujeres luego de un embarazo. Al comparar los resultados, encontraron que los pies de las mujeres lactantes eran medio centímetro más grandes. Es decir, habían crecido durante o luego del embarazo.
¿Por qué se produce el crecimiento de los pies después del embarazo?
Existe una hormona que se llama relaxina, considerada familiar de la insulina. El papel de la relaxina es preparar el canal de parto y las glándulas mamarias.
“La secreción de esta hormona aumenta cuando la mujer queda embarazada, ayudando a el desarrollo complementario del feto. Este hecho hace que los ligamentos del cuerpo y las articulaciones se relajen, lo cual hace que el cuerpo sea más elástico“.
El cuerpo al estar más elástico en la planta del pie, aplana el arco y logra que el pie se alargue para brindar a la mujer gestante un mejor apoyo. Por este motivo, es importante que se utilice un zapato adecuado, amplio y flexible nada que apriete y evitar completamente los tacones muy altos.
Sin embargo existen varios consejos que pueden ayudar a la mujer aliviar la retención de los líquidos: descansar con los pies elevados al menos por 15 o 20 minutos esa posición ayuda a mejorar la hinchazón de los pies, eliminar un poco la sal, preferir alimentos preparados en casa y por último beber suficiente agua.
Redacción Pediatría y Familia