El fútbol juvenil es un deporte tremendamente popular durante todo el año con muchos beneficios de aptitud física, pero, al igual que con cualquier deporte de contacto, conlleva un riesgo de lesiones para los jugadores que debe discutirse con el pediatra familiar.
“ Las familias, los jugadores de fútbol y los entrenadores deben ser conscientes de los tipos más comunes de lesiones, desde esguinces y fracturas hasta conmociones cerebrales, para que podamos trabajar juntos para prevenirlas“,
dijo Andrew Watson, MD, MS, FAAP, autor principal. del informe, generado por el Consejo de AAP sobre Medicina Deportiva y Fitness.
“Sabemos que hay circunstancias en las que es más probable que los jugadores se lastimen“. Nuestro informe describe la investigación detrás de las formas de mejorar la seguridad en el campo, tales como programas de formación específicos neuromusculares y una adherencia a las reglas, que potencialmente puede mejorar la seguridad de nuestros jóvenes atletas.
A medida que la tasa de participación en el fútbol aumentó de 1990 a 2014, aumentando en un 90%, el número de lesiones reportadas también aumentó dramáticamente. Un estudio retrospectivo de 25 años de visitas al departamento de emergencias mostró que el número anual de lesiones relacionadas con el fútbol entre 7 a 17 años de edad por cada 10,000 participantes de fútbol aumentó un 111% entre 1990 y 2014.
Según un estudio, la mayoría de las lesiones de fútbol juvenil resultan del contacto de jugador a jugador, con una proporción significativamente mayor de lesiones que ocurren durante la competencia en lugar de la práctica. Más atletas sufren conmociones cerebrales y lesiones del ligamento cruzado anterior (LCA), en particular las jugadoras.
La AAP recomienda:
- Programas de entrenamiento neuromuscular que enseñan técnicas adecuadas de aterrizaje y parada y desarrollan el equilibrio.
- Un énfasis en el juego limpio, el cumplimiento de las reglas y las técnicas de encabezado adecuadas y apropiadas para la edad para reducir el riesgo de conmoción cerebral.
- Estrategias de reducción de lesiones, incluida la finalización de un examen previo a la participación antes del comienzo de la temporada; hidratación y descanso adecuados; modificación de actividades en climas cálidos y húmedos; uso de espinilleras y protectores bucales de tamaño apropiado; y uso de gafas protectoras.
- Entrenamiento básico de soporte vital de entrenadores y lugar.
El informe clínico también examina la investigación sobre otros equipos de seguridad, calzado, césped o césped y condiciones ambientales.
“Alentamos a los niños a participar en actividades atléticas, especialmente deportes de equipo, para desarrollar habilidades, así como para desarrollar su estado físico y confianza mientras se divierten. Jugar fútbol es una excelente manera de lograr estos objetivos. Solo queremos asegurarnos de que jueguen de manera segura y salgan del campo con una sonrisa, no una cojera”.
dijo Jeffrey M. Mjaanes, MD, FAAP, autor principal del informe.
La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP), en una revisión exhaustiva de la investigación más reciente, publicará el informe clínico, “Lesiones de fútbol en niños y adolescentes” en la Pediatría de noviembre de 2019.
De: AAP
