Por: Redacción Pediatría y Familia
La llegada de un bebé en el hogar no es para nada fácil, es todo un reto, sobre todo cuando son padres por primera vez. Al enterarse, la pareja de qué va a llegar un nuevo integrante a la familia lo primero que se comienza hacer es organizar y preparar todo para su pronta llegada.
Los padres por lo general realizan un listado de las cosas más importantes que van a necesitar para el recién nacido. Uno de esos objetos que se necesita es la silla de paseo, pero ¿Cuál es la adecuada? esta pregunta es frecuente ya que existen muchas variedades de marcas en el mercado.
Por esta razón es fundamental que a la hora de comprar una silla de paseo, tengas el mejor asesoramiento. Una silla de paseo debe ser segura, pues recuerda que es la vida y la comodidad de tu pequeño.
Por ende te recomendamos que estés atento a lo siguiente:
- Si la silla es para un bebé de menos de 6 meses, es fundamental que venga con una capa adecuada para evitar el ingreso de la lluvia, sol y viento.
- Para los pequeños menores de 12 meses, en este caso es adecuado que la silla del pequeño sea reclinable ya que puede interactuar con sus padres o con la persona que el momento esté a cargo del niño.
- La manilla del coche debe tener una altura apropiada para los padres.
- El tamaño de la silla, la anchura y la profundidad, son indispensable a la hora de comprar la silla de paseo. La anchura puede variar entre los 40-50 cm hasta los 60 cm.
- El peso es otro de los aspectos considerables, recuerda que vas a cargar la silla y a tu bebé por eso es recomendable una silla ligera con peso de 8 kg.
- El cestillo donde se ubican lo objetos. Quizás esto no sea un dolor de cabeza a la hora de comprar, pero resulta de gran utilidad.
Cabe resaltar que muchos padres solo piensan en la comodidad de ellos al momento de cargar y aunque también es importante, es aún más importante la comodidad del menor y sobre todo si se usa con menores de 1 año.
Del mismo modo los materiales deben ser de buena calidad, que sean bastante acolchado, el respaldo debe tener buena comodidad en la espalda, que no les quede pequeña. Y después de asegurarnos de que es lo más cómodo para ellos, ya podemos fijarnos en se adapte a los padres.