Por: Redacción Pediatría y Familia
La depresión perinatal puede tener repercusiones a largo plazo en la salud de los padres y los niños si no se brinda tratamiento.
La depresión materna puede afectar a la salud del bebé antes y después del nacimiento, y es una de las complicaciones obstétricas más comunes, y costosas, en los Estados Unidos si no es diagnosticada o tratada, de acuerdo con un informe publicado por la American Academy of Pediatrics.
En su declaración de política actualizada titulada,”Cómo integrar la detección y el tratamiento de la depresión perinatal en la práctica pediátrica“, la AAP hace un nuevo llamado a los pediatras para detectar depresión en las mujeres durante y después del embarazo, y resume las repercusiones que tiene en la salud de los niños. El informe actualiza la guía que la AAP ofreció en su informe clínico del 2010.
Se estima que 50 % de las mujeres que sufren depresión durante y después del embarazo son diagnosticadas y reciben tratamiento, de acuerdo con la investigación que se menciona en el informe. Cuando la depresión perinatal no recibe tratamiento puede afectar el lazo afectivo y el apego saludable, distorsionar la percepción del comportamiento del bebé y deteriorar la atención que brinda la madre y su criterio sobre la seguridad.
La depresión perinatal se refiere generalmente a un periodo de tiempo cuando los síntomas se presentan en cualquier momento durante el embarazo o en un plazo de 4 semanas después del parto. Últimamente, algunas organizaciones profesionales han expandido el periodo de tiempo para incluir los 12 meses completos después del parto.
El informe revela que un estimado de 15 a 20 % de las nuevas madres se ven afectadas por la depresión perinatal.
La AAP recomienda que se le haga una prueba para detectar depresión a las madres durante el embarazo, y que los pediatras evalúen a las madres durante las visitas del control del niño sano a las edades de 1, 2, 4 y 6 meses de edad. También se exhorta a los pediatras a que colaboren con el equipo de proveedores de salud prenatal para identificar sistemas de apoyo para los pacientes y recursos de ayuda en la comunidad.
Muchos factores influyen en el riesgo de la depresión perinatal, tales como los antecedentes personales y de familia, el uso de sustancias, discordia matrimonial, violencia