En cuanto a la reumatología pediátrica, ¿Cuántas veces ha escuchado qué condiciones trata un reumatólogo pediatra? Posiblemente, rara vez. Ésto es debido a que hay mucho desconocimiento de las condiciones reumatológicas en niños.
No obstante, “en Estados Unidos la cantidad de niños afectados con artritis idiopática juvenil, una de las condiciones reumatológicas más comunes, sobrepasa la cantidad de niños que padecen de diabetes mellitus y fibrosis quística combinada en la población pediátrica en dicha nación”.
Cuando hablamos de condiciones reumatológicas, pensamos en dolores articulares en pacientes de edad avanzada. Sin embargo, para sorpresa de muchos, estas condiciones ocurren en niños también.
La reumatología pediátrica es una rama relativamente joven en la pediatría la cual surge de la reumatología de adultos ya que en el pasado se pensaba que se estaban tratando las mismas condiciones que padecían los adultos. El tiempo nos enseñó que esto no era así. En niños, estas condiciones, aunque similares, tenían sus propias particularidades y fue así como comenzamos a darle un enfoque distinto cuando estas condiciones ocurrían en la población pediátrica.
“Las condiciones reumatológicas envuelven mucho más que dolor e inflamación de las articulaciones, aunque hay que reconocer que es el síntoma más común por la cual nos visitan los pacientes”.
En la comunidad, muchas veces se intercambia el término condición reumatológica por artritis pero eso no es correcto. La inflamación articular puede ser un síntoma de alguna otra condición.
El factor común que tienen las condiciones reumatológicas es el componente inmunológico. Por lo general, en estas condiciones surge un descontrol del sistema inmunológico que es lo que las ocasiona. Este sistema es mucho más complejo que tener anticuerpos. El mismo es una red fina y balanceada de células y mensajeros entre las mismas. Al haber algún tipo de desbalance en el sistema, ésto se pudiese manifestar como una condición reumatológica.
“Las condiciones reumatológicas se pudiesen dividir en agudas, con una evolución de menos de seis semanas y en crónicas, con una evolución de más de seis semanas”.
Entre las agudas, las más comunes son Enfermedad de Kawasaki y Henoch-Schönlein Purpura. Entre las crónicas, las más comunes son artritis idiopática juvenil y lupus sistémico eritematoso. Estas condiciones se diagnostican por criterios clínicos ya que no existe una prueba de laboratorio diagnόstica.
“La artritis idiopática juvenil es un diagnóstico de exclusión”. Hay que descartar otras causas de dolor y/o inflamación articular. Hay muchos tratamientos nuevos que han cambiado para mejor el curso de esta condición. Hoy es raro ver un niño incapacitado a causa de esta condición. Por eso es tan importante poder identificarlo a tiempo.
Aquí se mencionan las condiciones más frecuentes pero hay una lista sumamente extensa de condiciones reumatológicas. Entre otras condiciones tratadas por un reumatólogo pediátrico, aunque no limitadas a ellas, tenemos:
- Dolores de crecimiento
- Hipermovilidad
- Vasculitis
- Espondilitis
- Dermatomiositis
- Síndrome de Sjogren’s
- Síndrome de antifosfolipidos
- Enfermedad de tejido conectivo mixto
- Escleroderma
- Policondritis relapsante
- Osteomielitis recurrente no infecciosa
- Artritis reactiva
- Fibromialgia
- Eritromelalgia
- Enfermedad de Raynaud’s
- Enfermedad del suero
- Sarcoidosis
- Fiebres periódicas
- Fiebre reumática
- Enfermedad de Lyme
- Uveítis.
Debido a la diversidad y amplio espectro de las condiciones reumatológicas, es difícil aislar unos síntomas en específico que nos hagan sospechar el diagnóstico. Sin embargo, entre los síntomas más comunes que nos deben crear un alto índice de sospecha tenemos dolor y/o inflamación articular, pérdida de peso que no podamos explicar, fiebre prolongada que no se pueda explicar, malestar general, problemas de la sangre como glóbulos blancos y/o rojos persistentemente bajos, nivel de plaquetas bajas, rash, debilidad, dolor muscular y pérdida de apetito.
Cualquier síntoma prolongado y no específico pudiese indicar la evolución hacia una condición reumatológica.
Puede ser frustrante el proceso de diagnóstico de una condición reumatológica ya que muchas de las mismas se diagnostican por la combinación de criterios clínicos y pruebas de laboratorios. De inicio, no siempre están presente todos los criterios, ya que los mismos pudiesen surgir poco a poco. Muchas veces, aunque se sospeche que muy posiblemente un niño va a desarrollar una de estas condiciones, éstas no se pueden prevenir.
Es por esto, que hasta que no se cumplan los criterios diagnósticos, por lo general, no se comienza el tratamiento. Siempre se debe contemplar que el beneficio del tratamiento a utilizarse sobrepase los posibles riesgos del mismo.
En resumen, las condiciones reumatológicas son muy poco conocidas y, aunque son sumamente complejas, se pueden tratar. Es de importancia que las mismas sean diagnosticadas lo antes posible ya que de ello depende su desenlace. De sospechar que su niño pudiese padecer de alguna de estas condiciones lo debe discutir con su pediatra y, de estar indicado, visitar a un reumatólogo pediátrico.
Por: Dra. Elivette Zambrana-Flores, FACR |Reumatóloga Pediátrica