Las enfermedades reumáticas se han asociado por mucho tiempo a la población adulta. Sin embargo, también aparecen en la infancia y la adolescencia. Este tipo de enfermedades afectan el tejido conjuntivo del organismo, el cual sirve de soporte a las estructuras del cuerpo como las articulaciones, músculos y tendones.
La artritis idiopática juvenil se presenta en menores de 16 años, con mayor frecuencia en las niñas y sus manifestaciones pueden iniciar desde el primer año de vida.
Los síntomas son muy variados y dependen de cada paciente. La artritis idiopática juvenil puede provocar dolor e inflamación de las articulaciones, erupciones de la piel, fiebre, inflamación de los ojos y cansancio. Estas molestias pueden afectar el crecimiento y desarrollo del niño.
De acuerdo con la Fundación Española de Reumatología, las estadísticas revelan que anualmente se diagnostican cerca de 10 casos nuevos por cada 100.000 niños a nivel mundial y 1 de cada 1.000 niños padece artritis crónica.
¿Cómo detectarla?
La artritis idiopática juvenil inicia de diferentes formas. En ocasiones puede comenzar de manera progresiva y se desarrolla sin que te des cuenta. El niño puede empezar a cojear, manifestar hinchazón o cansancio más frecuente de lo normal.
Cuando se presenta en niños muy pequeños pueden estar irritables y negarse a caminar. Si tu hijo es más grande, puedes ver que al levantarse de la cama presentan alguna dificultad.
En otras ocasiones la condición puede comenzar con síntomas fuertes como fiebre alta, manchas en la piel, dolor en las extremidades e inflamación en algunas articulaciones.
Si notas alguno de estos síntomas en tu pequeño es importante que asistas al especialista. No hay un examen que confirme la enfermedad así que es importante que compartas con el doctor los síntomas y dificultades que ha presentado tu hijo, ya que el diagnóstico se basa en las manifestaciones clínicas.
Adicional, es probable que el paciente deba ser valorado por un oftalmólogo, con el fin de identificar si hay presencia de uveítis (inflamación interna del ojo) y otras enfermedades que puedan desencadenar la artritis idiopática juvenil.
