Según un estudio publicado en la revista Journal of the American Medical Association, las mujeres con obesidad que se someten a una cirugía para bajar de peso antes del embarazo pueden reducir sus probabilidades de tener bebé con defectos congénitos importantes.
Para el trabajo, los investigadores examinaron datos de más de 33,000 nacimientos en Suecia entre los años 2007 y 2014.
De ellos, casi 3,000 niños nacieron de madres que se sometieron a un tipo de cirugía para perder peso, llamada bypass gástrico, antes de quedar embarazadas.
Las mujeres en el grupo de la cirugía perdieron un promedio de 40 kg y pesaron alrededor de 82 kg en su primer chequeo prenatal. Los resultados revelaron que el riesgo de defectos congénitos mayores fue casi 30% menor en los niños cuyas madres se sometieron a una cirugía para bajar de peso, en comparación con las madres que tenían obesidad.
El riesgo de defectos congénitos mayores fue del 3.4% en los niños nacidos de mujeres sometidas a cirugía de bypass gástrico, muy similar a la tasa del 3.5% entre los niños que nacieron de mujeres con peso normal.
Por otro lado, el riesgo de defectos congénitos mayores fue de 4.9% en los niños nacidos de mujeres que todavía padecían obesidad.
Los hallazgos desafían las preocupaciones que existen desde hace mucho tiempo respecto a que la cirugía para bajar de peso podría aumentar las probabilidades de defectos congénitos importantes, dijeron los autores.
“Este estudio demuestra que la pérdida de peso y la mejora del control del azúcar en sangre en la madre, en realidad, pueden reducir el riesgo de defectos de nacimiento en el niño“,
destacó Martin Neovius, autor del estudio y profesor de medicina en el Instituto Karolinska, en Suecia.
Por su parte, Olof Stephansson, médico obstetra e investigador principal del Departamento de Medicina de Solna, y autor principal del estudio, destacó:
“La cirugía bariátrica (para perder peso) tiene muchos efectos positivos sobre el embarazo. Sin embargo, es importante que estas mujeres reciban atención prenatal especial, que incluya ultrasonidos adicionales para controlar el crecimiento fetal así como asesoría nutricional detallada, que incluya la administración de los suplementos necesarios después de la cirugía para bajar de peso“.
Karolinska Institutet
