La malaria es una enfermedad que se produce por un parásito. El parásito se transmite a los seres humanos a través de las picaduras de los mosquitos infectados.
Aquellas personas que tienen malaria suelen sentirse muy enfermas, con fiebre alta y escalofríos. Cada año, cerca de 210 millones de personas se infectan con malaria, y aproximadamente 440 000 mueren a causa de la enfermedad.
Aunque la enfermedad es poco frecuente en climas templados, la malaria es común en países tropicales y subtropicales. Hay científicos de todo el mundo que están trabajando para desarrollar una vacuna que prevenga la malaria.
Síntomas
Una infección por malaria suele caracterizarse por los siguientes signos y síntomas:
- Fiebre
- Escalofríos
- Dolor de cabeza
- Náuseas y vómitos
- Dolor y fatiga muscular
Otros signos y síntomas pueden incluir:
- Sudoración
- Dolor abdominal o dolor en el pecho
- Tos
Algunas personas con malaria experimentan ciclos de “ataques” de malaria. Un ataque suele comenzar con temblores y escalofríos, acompañados de fiebre alta, seguidos de transpiración y luego se recupera la temperatura normal. Los signos y síntomas de la malaria habitualmente se manifiestan unas pocas semanas después de la picadura de un mosquito infectado. Sin embargo, algunos tipos de parásitos de malaria pueden permanecer latentes en el cuerpo hasta por un año.
Cuándo consultar al médico
Habla con el médico si sientes fiebre mientras vives en una región con alto riesgo de malaria o luego de haber viajado allí. Los parásitos que provocan la malaria pueden permanecer latentes en el cuerpo hasta un año. Si presentas síntomas graves, busca atención médica de emergencia.
Causas
Ciclo de transmisión de malaria: La malaria se origina a partir de un tipo de parásito microscópico. El parásito se transmite a los humanos más comúnmente a través de las picaduras de mosquitos.
Ciclo de trasmisión del mosquito
- Mosquito no infectado. Un mosquito se infecta cuando se alimenta de una persona con malaria.
- Transmisión del parásito. Si el mosquito te pica en un futuro, te puede transmitir el parásito de la malaria.
- En el hígado. Una vez que el parásito ingresa a tu cuerpo, se desplaza hasta el hígado, donde algunos tipos de parásitos pueden mantenerse inactivos hasta un año.
- En el torrente sanguíneo. Cuando los parásitos maduran, abandonan el hígado e infectan los glóbulos rojos. En este punto es cuando las personas generalmente manifiestan los síntomas de la malaria.
- Trasmisión a la siguiente persona. Si un mosquito no infectado te pica en este estadio del ciclo, se infectará con tus parásitos de malaria y puede transmitirlos a la siguiente persona a la que pique.
Otros modos de trasmisión
Debido a que los parásitos que causan la malaria afectan los glóbulos rojos, las personas también pueden contraer malaria por la exposición a sangre infectada; esto incluye:
- De la madre al bebé no nacido
- Mediante una transfusión sanguínea
- Al compartir agujas utilizadas para inyectarse drogas
Riesgos de enfermedad más grave
Las personas con mayor riesgo de enfermedad grave incluyen las siguientes:
- Niños pequeños y bebés
- Adultos mayores
- Viajeros procedentes de zonas sin malaria
- Mujeres embarazadas y sus hijos nonatos
La pobreza, la falta de conocimiento y el poco o ningún acceso a la atención médica también contribuyen a las muertes por malaria en todo el mundo.
Complicaciones
La malaria puede ser mortal. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades estiman que el 91% de todas las muertes por malaria se producen en África, comúnmente en niños menores de 5 años.
En la mayoría de los casos, las muertes por malaria están relacionadas con una o más complicaciones graves, las cuales incluyen las siguientes:
- Malaria cerebral. Si los glóbulos con parásitos bloquean los pequeños vasos sanguíneos del cerebro (malaria cerebral), puede producirse una inflamación del cerebro o daño cerebral. La malaria cerebral puede causar convulsiones y un estado de coma.
- Problemas de respiración. El líquido acumulado en los pulmones (edema pulmonar) puede dificultar la respiración.
- Falla de órganos. La malaria puede hacer que los riñones o el hígado fallen, o que el bazo se reviente. Cualquiera de estas enfermedades puede ser potencialmente mortal.
- Anemia. La malaria afecta los glóbulos rojos, lo cual puede resultar en anemia.
- Bajo nivel de azúcar en sangre. Las formas graves de malaria en sí pueden causar un nivel bajo de azúcar en sangre (hipoglucemia), al igual que la quinina, uno de los medicamentos que normalmente se utiliza para combatir la malaria. Un nivel muy bajo de azúcar en sangre puede provocar un estado de coma o la muerte.
La malaria puede reaparecer. Algunas variedades del parásito de la malaria, que típicamente causa formas más leves de la enfermedad, pueden persistir por años y causar recaídas. Aún no existe la vacuna.
De: Mayo Clinic