Neumonía neumocócica: consecuencias en la población pediátrica

1,682
la neumonía puede variar en gravedad desde suave a potencialmente mortal.

Por: Diana Castañeda

La enfermedad neumocócica es un virus frecuente en los niños menores de dos años, aunque en adultos mayores causa graves complicaciones. Sin embargo, es una enfermedad que se puede prevenir a través de la vacunación.

Según la especialista en pediatría, Yasmín Pedrogo, este padecimiento ocasionado por la bacteria del neumococo puede presentarse en los menores inicialmente con fiebre y tos que con el tiempo empeoran y, de no tratarse a tiempo puede ocasionar la muerte.

“La herramienta primordial para prevenir esta infección es la vacuna. Hemos visto desde el año 2000, cuando se reglamentó esta vacuna para todos los niños, ha disminuido considerablemente la prevalencia de esta condición “, adujo la pediatra durante entrevista para la Revista de Medicina y Salud Pública (MSP).

Si bien es cierto que, aunque el infante tenga las vacunas contra el neumococo, puede infectarse de neumonía, la probabilidad de que sea llevado a una unidad de cuidados intensivos es mínima.

Esta infección que inflama los sacos aéreos de uno o ambos pulmones. Los sacos aéreos se pueden llenar de líquido o pus (material purulento), lo que provoca tos con flema o pus, fiebre, escalofríos y dificultad para respirar. Diversos microrganismos, como bacterias, virus y hongos, pueden provocar neumonía.

Entre tanto, la doctora Pedrogo asegura que, la neumonía puede variar en gravedad desde suave a potencialmente mortal. Es más grave en bebés y niños pequeños, personas mayores a 65 años, y personas con problemas de salud o sistemas inmunitarios debilitados.

Factores de riesgo

En su mayoría, los pacientes con neumonía son tratados con antibióticos, sin embargo, hay casos en los que esta enfermedad es resistente a estos medicamentos y se debe brindar respiración artificial al paciente o tener complicaciones como:

  • Bacterias en el torrente sanguíneo (bacteriemia). Las bacterias que ingresan en el torrente sanguíneo desde los pulmones pueden propagar la infección a otros órganos y, potencialmente, provocar una insuficiencia orgánica.
  • Dificultad para respirar. Si la neumonía es grave o si tienes enfermedades pulmonares crónicas ocultas, posiblemente tengas problemas para obtener suficiente oxígeno al respirar. Es posible que debas hospitalizarte y utilizar un respirador artificial (ventilador) hasta que tus pulmones sanen.
  • Acumulación de líquido alrededor de los pulmones (derrame pleural). La neumonía puede causar la acumulación de líquido en el fino espacio que hay entre las capas de tejido que recubren los pulmones y la cavidad torácica (pleura). Si el fluido se infecta, es posible que deban drenarlo a través de una sonda pleural o extraerlo mediante una cirugía.
  • Absceso pulmonar. Un absceso tiene lugar si se forma pus en una cavidad en el pulmón. Normalmente, los abscesos se tratan con antibióticos. A veces, se necesita una cirugía o un drenaje con una aguja larga o una sonda que se coloca en el absceso para extraer el pus.

¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 0 Promedio: 0)
Cargue Artículos Más Relacionados

Mira además

5 razones para dejar que tu pequeño juegue con la tierra

Refuerza su sistema inmunológico de por vida. Estar en contacto desde niño con diferentes …