Los tics nerviosos son considerados como movimientos involuntarios, pueden ser bruscos, cortos y repetitivos en cualquier zona muscular. Este trastorno se presenta en niños entre los 6 y 10 años de edad.
Los tics nerviosos se presentan en cualquier musculo, en especial en los parpados, mandíbula, cejas. Además, se puede evidenciar en movimientos de cabeza, movimientos de hombros y chasquido de la lengua.
Cuatro tipos de tics nerviosos:
- Motores simples
Encoger los hombros, movimientos de la cabeza y guiños del ojo son los tics más comunes. - Motores complejos
Diferentes grupos musculare son afectados con el fin de realizar una acción en específico, como, por ejemplo: saltar y pisotear. - Vocales simples
Este tipo de tic afecta la fonación (proceso en la que se produce la voz humana), como, por ejemplo: gruñidos y el carraspeo son signos de un tic nervioso. - Vocales complejos
En este tipo de tic podemos distinguir la ecolalia (repetir una palabra que escucha), alilalia (repetir sus propias palabras) y la cropolalia que se relaciona con el síndrome de Tourette, en la que el niño repite palabras obscenas e insultos.
Las causas de los tics nerviosos se deben por factores psicológicos, ambientales y genéticos.
- Factores psicológicos y ambientales
El estrés y la ansiedad son síntomas que producen estos tics. El fallecimiento de un familiar y la llegada de un hermano son las causales de este trastorno. - Factores genéticos
Investigaciones científicas apuntan señalan la presencia de tics en gemelos. Los genes pueden contribuir a la aparición de estos movimientos involuntarios.
Redacción Pediatría y Familia
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