Señales para saber si el bebé está en pleno proceso de dentición.
La salida de los dientes puede ser un tema difícil para los padres. Los bebés pueden comenzar a morder a los pocos meses, pero puede llevarles algún tiempo antes de que aparezca el primer diente y ese proceso, además de largo, puede ser agotador porque puede causar trastornos a la hora de dormir al pequeño. ¿Quieres saber cómo afecta la salida de los dientes al sueño de los niños?
Síntomas de que a tu bebé le está saliendo un diente
¡Como si las regresiones del sueño, los hitos de desarrollo, las asociaciones del sueño, el cambio de horarios de las siestas y las dificultades para alimentarse no son suficientes, también tenemos lidiar con el dolor de dientes en nuestros hij@s!
Mientras que algunos bebés y niños pequeños parecen no tener ninguna molestia, ni un mínimo de dolor cuando brota el primer diente, otros bebés pasan días muy incómodos y con mucho dolor y, por supuesto, la incomodidad y el dolor generalmente se traducen en ¡NO DORMIR!
Algunos bebés dormirán perfectamente mientras que otros tendrán muchos despertares nocturnos. Algunos expertos dicen que la dentición no tiene por qué irrumpir en el sueño, pero no creo que sea del todo cierto. Obviamente, todos los bebés son diferentes y todos tendrán diferentes tolerancias al dolor, pero en pequeña o gran medida puede afectarles.
¿Cómo podemos saber que ese malestar del pequeño y, sobre todo, esa alteración en su ritmo del sueño puede estar producido por la salida de un diente? Existen ciertos síntomas que nos pueden alertar de ello:
- Babea más de lo habitual.
- Tiene un sarpullido en la barbilla debido a la saliva.
- Sufre diarrea (tragar saliva adicional puede hacer que la caca de tu hijo sea más intensa de lo normal).
- Se niega a comer (las encías sensibles hacen que sea difícil amamantar y comer con comodidad).
- Muerde más de lo habitual.
- Aumentan los despertares nocturnos.
- Está más nervioso o llora más de lo habitual.
Consejos para que la salida de los dientes no afecta al sueño de los niños
Si tu hij@ está en plena fase de la dentición y se siente realmente incómodo, es casi seguro que afectará su horario habitual de sueño. Afortunadamente, hay formas en las que puedes darle consuelo y mantener los buenos hábitos de sueño.
- Teniendo en cuenta que los dientes de leche irán saliendo en un periodo de 2 años, piensa en un plan sobre cómo manejarlo porque cada vez que brote un diente no se puede convertir en un problema de sueño.
- Si está amamantando, seguramente el dar pecho le calme, pero establece límites y ten cuidado de no crear una asociación de sueño con la lactancia para dormir.
- Consulta con tu pediatra si puedes darle analgésicos. Y, también si tiene fiebre o cualquier síntoma de enfermedad.
- -Hay una gran variedad de mordedores para la dentición que ayudan a minimizar el dolor. Muchos de ellos están diseñados para ser enfriados, ya que el frío puede ayudar a adormecer las encías de tu hijo y así aliviar el dolor.
- Proporciona confort y bienestar sin deshacer los buenos hábitos. Descubre cómo puedes ofrecer comodidad sin crear nuevos ‘malos’ hábitos de sueño. Por ejemplo, si tu hijo está durmiendo en su cunita, intenta evitar traértelo a tu cama. En su lugar, abraza a tu hijo hasta que esté tranquilo, pero vuélvelo a poner en su cuna para que siga durmiendo una vez haya pasado ese malestar.
Es posible que pases varias noches malas hasta que salga el dientecito, pero trata de evitar hacer algo que no haces. Por una noche que duermas con él o le des el pecho para calmarlo y se quede dormido, no pasa nada, pero si lo haces durante varios días o semanas lo más probable es que hayas creado una nueva expectativa para tu hijo y ya no quiera volver a dormir como estaba durmiendo. Y paciencia, mucha paciencia, serán unos días más complicados, pero pasarán.
Guía Infantil | Olga Sesé