La alimentación de los bebés es indispensable para su adecuado desarrollo y de acuerdo con información de los especialistas, nada los alimenta más que la leche materna, sobre todo durante sus primeros meses de vida.
Por eso, si has cumplido tu licencia de maternidad y es hora de regresar al trabajo, o, necesitas salir de casa y dejar a tu pequeño bajo el cuidado de alguien más, te daremos algunas claves para que no te preocupes por su alimentación.
Al separarte de tu bebé, es inevitable que miles de sensaciones aparezcan: nervios por saber con quién dejarlo, saber si lo cuidaran bien y cómo será alimentado.
¡Tranquila!, al igual que tú, conocemos la importancia de la leche materna y en esta oportunidad te invitamos a realizar la extracción manual de tu leche, la cual no solo aportará al buen desarrollo físico y mental de tu pequeño, sino que te permitirá aliviar la congestión de tus mamas.
Aquí te damos a conocer algunas sugerencias para conservarla en el congelador, es indispensable que no olvides hacer los depósitos en bolsas de plástico diseñadas exclusivamente para el almacenamiento de leche materna, frascos en vidrio o recipientes plásticos en policarbonato, de
esta manera favorecerás la adecuada preservación de la misma.
Cómo descongelar y calentar la leche extraída
- Es importante que realices fracciones de acuerdo a el consumo que haga tu hijo.
- La puedes conservar a temperatura ambiente, en la puerta de la nevera o directamente en el congelador.
- Para descongelar debes hacerlo por pasos, iniciando bajo el chorro del grifo con agua fría y posteriormente puedes ir aumentando el nivel de temperatura hasta alcanzar el mas recomendable para el bebé.
- Te aconsejamos no utilizar el horno microondas.
- No debes permitir que la leche hierva.
- Puedes introducir el recipiente con leche en otro con agua caliente, sin que este esté directamente sobre el fuego.
- Limpieza de los envases :No olvides la importancia de lavar adecuadamente todos los objetos que están involucrados en la crianza de tu bebé. Puedes utilizar jabón, abundante agua caliente y no olvides secarlos antes de depositar en ellos la leche extraída.
Tiempo de almacenamiento
La leche conservada a temperatura ambiente dura 4 horas, en el refrigerador hasta 12 horas y congelada hasta 15 días.
La persona encargada de cuidar a tu pequeño debe pasar del congelador a la nevera, después a temperatura ambiente y posteriormente puede calentarla.