La salud mental de los niños, en algunos casos pasa desapercibida debido a que los síntomas pueden llegar a ser distintos a como los conocemos, o pueden ser confundidos con otros trastornos.
Es normal que como padres protejamos a los niños de todo aquello que les da ansiedad, sin embargo, lo que logramos con la sobreprotección, es empeorar los síntomas de ansiedad en los pequeños. ¿Cómo actuar entonces?
1. No intentes eliminar la ansiedad, enséñale al pequeño a gestionar sus síntomas.
Lo mejor que pueden aprender los niños es a sobrellevar la ansiedad, y tolerarla de la mejor manera posible, de esta manera sabrán como actuar ante un ataque o crisis, y la superarán poco a poco.
2. No alejes al niño de aquello que le produzca ansiedad.
Evitar que el niño enfrente sus tomores, pueden brindarles una sensación de bienestar a corto plazo, pero no los ayudará a superar los temores. En pocas palabras, refuerza la ansiedad a largo plazo.
3. Sé optimista pero realista.
No prometas al pequeño cosas que no van a suceder, o promesas que no puedas cumplir. Es importante que el niño pueda sentir un optimismo espontáneo de parte de los padres para sentirse confiado y capaz de manejar las situaciones que estén por llegar.
4. Valida sus sentimientos negativos, pero no los justifiques o impulses.
Respetar lo que el niño piensa o siente es importante para no anular sus sentimientos. Hay que mostrarnos empáticos y comprensivos en la misma medida en que debemos animarlos a afrontar sus temores.
5. Evita las preguntas cerradas.
Debes animar al niño a hablar, expresar sus sentimientos y darle confianza. Evita que el niño se aisle, se cierre o reprima los sentimientos, mantén una buena comunicación con él.
6. No refuerces los temores del niño.
Hay que tener mucho cuidado con aquello que les decimos o cómo actuamos, para no cometer el error de alentar sus miedos. Debes tener en cuenta, también, el tono de voz y el lenguaje corporal a la hora de comunicarnos con él.
7. Anímalo.
Haz que tu hijo sepa que lo quieres y que cuenta contigo no importa qué. Hazle saber que entre mayor sea la tolerancia a la ansiedad, más rápido disminuirán los malestares.
8. Disminuye el tiempo de expectación.
Para nadie es un secreto que los momentos antes de enfrentarnos a una situación que nos produce temor, son los instantes previos. Por lo general los niños manifiestan rechazo a ir al dentista, al médico, o a otros especialistas, de manera que debemos hacer más amenas las horas previas a la cita.
9. Propón buscar soluciones entre los dos.
Interioriza con él, ¿qué es lo peor que podría pasar? y lo más importante ¿cómo podría manejarlo?. La incertidumbre para muchos niños es uno de los causantes de la ansiedad, y reducirla al máximo puede aminorar los síntomas de manera efectiva.
10. Moldea formas saludables para manejar la ansiedad con el niño.
El trastorno de ansiedad no le compete solo a los niños, también a nosotros como padres. Naturaliza los sentimientos de estrés y ansiedad que puedes llegar a atravesar, y deja que los niños te vean atravesarlos y superarlos.