Los especialistas de la AAP formaron parte del equipo médico de investigadores psiquiátricos y expertos clínicos que trabajaron en la primera actualización que se les hace a las pautas en 10 años.
Se calcula que uno entre cinco adolescentes sufre de depresión alguna vez durante su adolescencia, pero con frecuencia no son diagnosticados ni tratados, a veces debido a la falta de acceso a especialistas de la salud mental.
Teniendo en cuenta que los pediatras y otros proveedores de salud primaria son con frecuencia los que están en la mejor posición de identificar y ayudar a los adolescentes con problemas, la American Academy of Pediatrics (AAP) ha publicado una actualización a las pautas médicas para tratar la depresión en los adolescentes.
Las “Pautas para tratar la depresión en los adolescentes en el ámbito de atención primaria” (en inglés), divididas en dos partes, fueron elaboradas por el comité directivo norteamericano de investigadores y expertos médicos que contaba con la participación de la AAP, la Sociedad Pediátrica de Canadá y asociaciones de psiquiatría de ambos países.
Las “Pautas para combatir la depresión en los adolescentes en el ámbito de atención primaria: (GLAD-PC): Parte I. Preparación de la práctica, identificación, evaluación y gestión inicial” y “Pautas para el tratamiento de la depresión en adolescentes en el ámbito de atención primaria: (GLAD-PC): Parte II: Tratamiento y gestión en curso“, serán publicadas en el número de marzo del 2018 de Pediatrics (en línea el 26 de febrero).
Esta es la primera actualización que se les hace a las pautas en 10 años que sirven como herramienta a los médicos para ofrecer recomendaciones para la participación del paciente y los miembros de la familia.
“Muchos pacientes van a ver a sus pediatras por raspaduras en sus rodillas o dolores de garganta, pero no piensan en ellos cuando se trata de pedir ayuda debido a problemas emocionales o de comportamiento”, dijo la Dra. Rachel Zuckerbrot, MD, FAAP, una de las autoras principales de las pautas.
“La American Academy of Pediatrics brinda ayuda a los pediatras a estar preparados para identificar y tratar este tipo de problemas”.
Las pautas se enfocan en la juventud entre los 10 y 21 años, y distinguen las diferencias entre las formas leves, moderadas y severas del trastorno depresivo mayor. Por primera vez las pautas también avalan el diagnóstico de la depresión en adolescentes para todos los niños mayores de 12 años, que es algo que ya recomienda la AAP.
Estas son algunas de las recomendaciones de la AAP:
- Ofrecer un equipo de tratamiento que incluya al paciente, la familia y un acceso a expertos de la salud mental
- Ofrecer educación y herramientas para identificar, evaluar y diagnosticar pacientes.
- Asesoramiento para la depresión y opciones para el control del trastorno.
- Elaborar un plan de tratamiento con metas específicas que funcionen en el hogar y en el entorno escolar y con pares.
- Elaborar un plan de seguridad, cuando sea necesario, que incluya restricción al acceso de armas letales, tales como armas de fuego en el hogar y ofrecer métodos de comunicación en casos de emergencia.
- Aunque estas pautas sugieren maneras para involucrar a los miembros de la familia en el tratamiento de la salud mental del adolescente, también recomiendan que el pediatra pase tiempo a solas con el adolescente.
“Queremos que los adolescentes completen la herramienta para detectar la depresión como parte de sus visitas regulares de control de salud”, dijo la Dra. Amy Cheung, MD, que es también una autora principal de estas pautas. “Los padres deben sentirse en libertad de ofrecer sus propias observaciones, preguntas o inquietudes, que pueden ayudar al médico a formarse un panorama completo de la salud del paciente”.
Los pediatras deben mantenerse especialmente atentos a supervisar a los adolescentes que tienen un historial familiar de depresión, trauma, abuso de sustancias o adversidad, de acuerdo con las pautas. Las pautas también ofrecen orientación a los pediatras sobre cuándo deben consultar con proveedores de la salud mental, basados en la severidad del trastorno psiquiátrico.
“Existen con frecuencia recursos para la salud mental en la comunidad que las familias y los médicos pueden consultar para obtener la mejor atención posible”, dijo la Dra. Zuckerbrot. “Entre más pronto identifiquemos a los adolescentes que tienen síntomas de depresión, mejor será el resultado”.
Healthychildren.org