Durante los primeros años de vida el crecimiento de los niños es acelerado y en cada una de sus etapas tienen necesidades diferentes. Por ello, es importante que la estimulación en los niños se realice durante los 6 primeros años, ya que en estas edades las conexiones cerebrales se están formando. Para realizar una estimulación adecuada, te contamos cuáles son las etapas que viven los niños y cómo estimularlos en cada una de ellas:
De O a 12 meses
Desde el nacimiento se deben realizar masajes al bebé, esto permita fortalecer lazos de amor. Además, las caricias le brindan al bebé una sensación de tranquilidad, similar a la que disfrutaba en el útero.
Según recomendaciones de especialistas no es conveniente llevar a los niños a lugares de estimulación temprana ya que los niños se están adaptando al nuevo mundo. Aunque pasado este tiempo es bueno exponerlos a espacios de socialización para evitar que se vuelvan esquivos.
De 12 a 18 meses
En estas edades los niños muestran interés cuando les hablas, recurre a tu creatividad e inventa cuentos cortos en los que ellos también puedan participar. También, incluye la música en las actividades con los más chicos del hogar, cántale canciones así ellos intentarán imitar tarareado algunas palabras.
De 18 meses a 2 años
En esta etapa se desacelera el crecimiento en los niños, permanecen despiertos durante un tiempo más prologado y son más activos. Pueden establecerse horarios de juegos en los que se pueden incluir juguetes de encajar o halar. También es bueno llevarlos al parque para estimular el movimiento de sus extremidades.
De igual modo, como en esta edad empiezan a diferenciar las cosas puedes darles objetos gruesos y delgados, alternándolos entre una mano y otra.
A los dos años ya se convierten en exploradores y buscan ser más independientes. En cuanto al lenguaje, dejan de lado los balbuceos, sonidos y señalamientos. Por ello, se recomienda que mientras realizas una actividad le hables al niño y le expliques lo que estás haciendo.
3 años en adelante
A partir de esta edad debes darles la independencia que ellos piden, déjalos vestirse y comer solos así evitaras que sean personas inseguras y dependientes en el futuro. Llévalos a que jueguen golosa, que salten tronquitos y alternen sus piernas, para darle sentido al movimiento. También puedes llevarlos a nadar o a gimnasios infantiles.
