Los bebés que nacen en verano suelen presentar granitos en su piel debido a las altas temperaturas. Este sarpullido o sudamina es una alteración de la piel, que no tiene importancia, aunque es un poco antiestética. Es importante no confundirla con otras enfermedades infantiles en las que puede aparecer un sarpullido en la piel y, por este motivo, conviene consultar con el pediatra.
¿Por qué tiene granitos mi bebé?
Aunque es muy común en los primeros meses de vida de los bebés, la sudamina puede brotar en niños más mayores cuando el termómetro se eleva por encima de los 30 ºC. En ocasiones, los granitos pueden aparecer de forma dispersa o bien presentarse juntos formando ronchas de color rojizo. También puede producir picor como consecuencia de que la piel está inflamada.
Los granitos que produce la sudamina brotan cuando la piel del bebé no deja salir el sudor y éste se queda retenido en las capas de la dermis, formando pequeños granitos rojos. Las glándulas obstruidas no pueden eliminar el sudor y, por este motivo, los granitos pueden evolucionar hacia unas diminutas ampollas.
Cuando la sudamina es leve, las ampollas diminutas se rompen fácilmente y se forman costras. Pero si el calor continúa, los granitos rojos pueden picar y reaparecer con frecuencia en distintas zonas del cuerpo. Las más habituales son la frente, las mejillas, los párpados y la nariz. Pero también suelen aparecer en los brazos, en la nuca y en el tronco superior, así como en la zona del pañal y en los muslos cuando las gomas ajustadas obstruyen las glándulas sudoríparas.
7 Consejos para prevenir la sudamina o los granitos del bebé
La mejor recomendación para mantener al bebé libre de sudamina es evitar que sude, pero en verano, con la subida de las temperaturas, es una tarea difícil. Estos consejos te pueden ayudar a mantener fresquito a tu bebé:
1. Revisa su pañal con frecuencia. Cámbiale en cuanto esté mojado para que no acumule calor y humedad. Así, además, previenes la dermatitis del pañal.
2. El baño sólo con agua. Refresca a tu bebé sumergiéndole en agua tibia en su bañera y no uses geles o jabones que puedan irritar su piel.
3. Sécale con suaves toques. Evita rozarle con la toalla y sécale dándole pequeños toquecitos para absorber la humedad de su piel. Evita aplicarle lociones o talcos que puedan obstruir los poros de su piel.
4. Vístele con ropa ligera. Los tejidos de algodón son transpirables y absorben el sudor. Evita ponerle ropa ajustada.
5. Ambiente fresco. Utiliza el aire acondicionado para refrescar su habitación. Conviene ponerlo un rato antes de llevarle a la habitación para que el bebé no reciba el aire acondicionado directamente. También refrescan los ventiladores, que mueven el aire.
6. Huye del sol. Evita exponerle al sol y si ya gatea, no le dejes realizar demasiada actividad física en las horas de más calor.
7. Toca su nuca. Para saber si tu bebé tiene calor o está sudando, toca su nuca, si está húmeda es que está acalorado.
¿Cómo curar la sudamina en los bebés?
Cuando los granitos de la sudamina ya han aparecido, además de aplicar todos los consejos preventivos para evitar que se agraven, su pediatra puede recomendar una crema con cortisona, en los casos más graves. Como remedio casero, puedes preparar una mezcla de agua con una pizca de bicarbonato para refrescar las zonas afectadas. Deja secar la piel al aire.
Guía Infantil | Marisol Nuevo