La vacuna en este momento no está disponible para ningún niño y solo debe ser administrada a mayores de 18 años.
Los ensayos de fase tres para niños se están llevando a cabo en este momento en diferentes lugares de Estados Unidos, una vez sea aprobada esta fase, y superen los análisis, se tienen que hacer los ensayos completos como se han realizado en la población de adultos y así poder determinar en qué rangos de edad se puede ir administrando la vacuna, pero hasta el momento ningún niño va a tener acceso a la misma.
Aunque la isla espera con ansiedad la llegada inminente de la vacuna en un momento de récord en cifras de hospitalización y contagio que impide recibir la navidad sin tantas cifras. Los números son desalentadores y requieren de mayor compromiso y de una alta respuesta de vacunación para lograr frenar los números y para retomar la normalidad.
Los sectores médicos están preocupados y recuerdan que no todos reciben los síntomas sin complicaciones, por lo que es importante continuar acatando las medidas
Aunque la mayoría de afectados son adultos, no dejan de existir casos de personas jóvenes que se complican y fallecen.
También es importante destacar, que los niños y adultos con alergias, como por ejemplo al huevo, como han demostrado los estudios, deben evitar la aplicación de la vacuna ya que puede generar efectos secundarios, entendiendo que las personas alérgicas comúnmente van a tener una reacción a las vacunas y la del COVID-19 no es un caso aislado.
Se espera vacunar al 70% de la población, el 30% restante incluye a quienes no se pueden vacunar ya sea por alergias o por otras condiciones, como en el caso de los niños, ya que aún no culminan los estudios clínicos en la población pediátrica, por lo que no se les va a administrar.
Puede deteriorarse la salud de los menores por COVID-19
Los pacientes con enfermedades crónicas serán vacunados en la fase uno porque tienen un mayor riesgo si contraen el COVID-19.
De igual forma, se resalta la importancia de que los niños no esten expuestos a espacios con grandes multitudes y la importancia de un mayor cuidado en pacientes jóvenes, especialmente quienes tienen alguna condición crónica como problemas de hipertensión, asma, diabetes o diferentes problemas respiratorios ya que se enfrentan a un nivel de riesgo mayor.
Aunque también se han presentado casos en los que sin ningún cuadro clínico previo, los pacientes presentan complicaciones respiratorias y neurológicas.
Sin duda el virus, se convierte en un reto que se reproduce en el cuerpo y genera problemas pulmonares, inflación cardíaca o afectación multi órganos, por lo que el compromiso sigue siendo de todos.
