Para algunos padres primerizos y para algunos otros que no lo son, darles medicina a los bebés o a los niños pequeños, se ha convertido en un constante desafío, más allá de con qué elemento suminístralos, está en tener la convicción de que el niño necesita el medicamento.Muchas veces el rechazo de los niños hacia los medicamentos puede deberse a que perciben la duda de los padres y la desconfianza.
Puedes procurar asesoría del pediatra en caso de que el niño rechace los medicamentos aún necesitándolos. El profesional puede recomendarte otros medicamentos cuya dosis sea menor y sepan mejor. Uno de los factores de rechazo hacia los medicamentos, es la presentación, es decir, para los niños es más fácil ingerir un jarabe a una tableta. Averigua por las alternativas que te pueden facilitar el proceso.
Cómo hacer que el niño tome sus medicamentos
- Lee las instrucciones de la etiqueta, modo de uso, contraindicaciones y posibles efectos secundarios.
- Sigue las sugerencias de las medidas para las dosis.
- Asegúrate de que el niño esté sentado o de pie al momento de tomar el medicamento, reduciendo el riesgo de atragantamiento o asfixia.
- Evita relacionar los medicamentos con caramelos, porque puede generar una confusión riesgosa para el niño, al igual que es importante que evites que el menor consuma medicamentos sin supervisión.
- Los especialistas recomiendan evitar mezclar el medicamento con otras bebidas, ya que puede quedarse adherido al biberón o el vaso.
- Es normal que los niños no quieran tomarse el medicamento porque su sabor no es el mejor, por ende no lo castigues. Como muchos otros factores de la maternidad, este requiere de mucha paciencia para que el pequeño acepte el medicamento.
Se recomienda que mezcles los medicamentos con alimentos de sabores fuertes para reducir el mal sabor, o puedes alterar el sentido del gusto dándole bebidas frías después del medicamento para bajar el mal sabor de la boca.