El vitíligo es la enfermedad de la piel producida por la destrucción selectiva de los melanocitos. Se manifiesta físicamente mediante manchas blancas indoloras y asintomáticas de la piel en diferentes partes del cuerpo. Según estudios basados en la historia clínica de algunos pacientes, los síntomas pueden empezar a aparecer a cuelquier edad, aunque generalmente se presenta antes de los 30 años.
Manifestación en niños
A igual que en los adultos, se manifiesta con una o varias manchas alrededor de la boca, ojos, nariz, ingles, axilas, manos, antebrazos o genitales. El tamaño de las manchas es bastante variable, es decir, pueden ser de pocos milímetros o pueden llegar a abarcar grandes superficies de piel. Los especialistas recomiendan que ante la primera alerta o mancha, se consulte inmediatamente con el pediatra de cabecera.
Generalmente, el diagnóstico del vitíligo, es clínico. En algunos casos es necesario utilizar la Luz de Wood, una luz especial que permite visibilizar las manchas mucho mejor. Otras veces, se requiere exámenes mediante los que se evidencian los bajos niveles de melanocitos.
El tratamiento
Las manchas producidas por esta afección son benignas, es decir que no ponen en riesgo la salud de los pacientes, aunque en algunos casos se ve disminuída la calidad de vida de los niños, quienes sí pueden ser sometidos a tratamientos tópicos, quirúrgicos o fototerapias para igualar las diferencias del tono de la piel.
Lo que sí es vital para los niños con vitíligo, es que realicen una adecuada fotoprotección, puesto que la ausencia de melanina supone una exposición mayor a la radiación ultravioleta.