Por: Diana Castañeda
El zinc es esencial por el micronutriente que aporta al metabolismo del cuerpo humano y, a su participación en más de 300 procesos enzimáticos como catalítico o cofactor. Además, forma parte de grandes funciones vitales para el organismo como el desarrollo del sistema inmune, la formación de proteínas para el proceso de sanación de heridas, síntesis de DNA y división celular, entre otras responsabilidades biológicas.
Así lo confirmó la doctora Marylin Toledo, pediatría del Manatí Medical Center, especialista en niños y adolescentes, para la Revista Pediatría y Familia, donde también anunció que después del hierro, el zinc es el microelemento más abundante en el organismo.
“Al ser esencial, significa que el organismo no lo produce, sino que lo debe adquirir, ya sea a través de una dieta, suplementos o fortificaciones de alimentos”, explicó.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el zinc desempeña un papel fundamental en procesos biológicos como el crecimiento, la diferenciación y el metabolismo celular, y que la carencia de este micronutriente restringe el crecimiento infantil y disminuye la resistencia a las infecciones, lo que contribuye de manera importante a la morbilidad y la mortalidad en los niños pequeños.
Influencia del zinc en el fortalecimiento del sistema inmune
El sistema inmunológico organiza su funcionamiento en tres áreas: barreras físicas, sistema innato o celular y sistema adaptativo o humoral. “Es importante destacar que la causa más grande de inmunodeficiencia son las deficiencias nutricionales en la población humana y de estas se piensa que el zinc es una de las más grandes, por lo que se le ha dado una especial atención en los últimos tiempos como un fortificador del sistema inmune”, reconoce la especialista en salud pediátrica.
Por su parte, la OMS estima que más de la cuarta parte de los menores de cinco años sufre retraso del crecimiento, y por tanto tiene un mayor riesgo de muerte y de padecer otros efectos adversos a lo largo de la vida.
Esta organización, además asume que, si bien no es frecuente que en el ser humano se produzca un déficit grave de zinc, sí que puede darse una carencia leve o moderada, en especial en poblaciones con un consumo bajo de alimentos de origen animal ricos en zinc y un consumo elevado de alimentos ricos en fitatos, que inhiben la absorción del zinc.
Importancia del zinc para el crecimiento de los niños
De acuerdo con la publicación realizada por la página de Healthy Children dos de tres niños y tres de cuatro niñas, en edad adolescente, no cumplen con la cantidad diaria recomendada de 15 y 12 miligramos al día, respectivamente. Una escasez de zinc debilita la inmunidad, de tal modo que los jóvenes pueden desarrollar más infecciones de las usuales; las heridas menores pueden tardar más en sanar, también.
A su vez, se considera que es mejor reabastecer el cuerpo por medio de la dieta. “Las personas vegetarianas, sin embargo, pueden ser particularmente más propensas a una deficiencia de zinc. Mucho del zinc en frutas, vegetales y pan no siempre se absorbe completamente. La carne bovina roja magra es una fuente ideal de zinc, como lo son el pollo y el pescado. Un complejo multivitamínico con zinc proporciona los requerimientos diarios de este mineral”, explica el artículo de Healthy Children.
*Recuerda preguntar siempre a tu pediatra.
