Por: Elivette Zambrana, MD, FACR
¿Cómo sabemos si un niño tiene sobrepeso?
Según CDC, la obesidad en niños se ha triplicado en los últimos treinta años. Para determinar si un niño tiene sobrepeso u obesidad, se calcula su índice de masa corporal (BMI) y se compara con las gráficas de crecimiento del CDC.
Se considera sobrepeso si su BMI está entre los percentiles 85 y 95 y obesidad cuando es mayor del 95 porcentual.
¿Epidemia de sobrepeso?
La razón por la que atravesamos una epidemia de sobrepeso y obesidad es la falta de una dieta balanceada y un descenso en la actividad física. Se ha determinado que esta es la primera generación que va a tener una expectativa de vida menor que la generación anterior.
Lo más preocupante es que los jóvenes obesos son más propensos a ser adultos con sobrepeso u obesos, por lo que esta situación no pareciera tener perspectivas de mejorar en años venideros. El sobrepeso y la obesidad en niños siguen en aumento. Sin un tratamiento eficaz es muy probable que permanezcan con sobrepeso y obesidad a lo largo de sus vidas, poniéndolos en riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes y muerte prematura, así como sufrir consecuencias físicas y psicológicas en la niñez.
¿Cuáles son las recomendaciones de los especialistas?
La Academia Americana de Pediatría (AAP) recomienda medidas que se pueden tomar como familia, entre las que resalta una alimentación más saludable.
Comprar menos bebidas azucaradas, bocadillos altos en calorías y dulces. Si usted quiere tener estos alimentos para una celebración especial, se deben comprar poco antes del evento y eliminarlos inmediatamente después.
Los alimentos y bebidas saludables -agua, arándanos, vegetales y otros refrigerios bajos en calorías- deben estar fácilmente disponibles y a la vista: en la mesa de la cocina, alacena o en la parte delantera de las tablillas del refrigerador. Los alimentos con alto contenido calórico deben ser menos visibles, envueltos en papel de aluminio en lugar de una envoltura transparente y en la parte posterior de la nevera o la alacena.
Reducir los comportamientos sedentarios. Una forma de lograrlo es tener menos televisores en la casa y no colocarlos en la habitación o cocina. Se debe limitar en tiempo de pantalla.
Asegurarse que los niños duerman las horas adecuadas para su edad. Por lo general, los niños que duermen menos de 9 horas por noche tienen más probabilidades de tener sobrepeso u obesidad.
Importancia de las actividades en la familia
Las familias pueden disfrutar la realización de actividades físicas. Así podrán cumplir con los 60 minutos de actividad de moderada a rigurosa recomendados al día. Por ejemplo:
- Participar en deportes de equipo
- Ir a un parque, parque infantil o senderos
- Caminar/andar en bicicleta
- Jugar a los bolos
- Sacar a pasear a la mascota
- Usar las escaleras
- Caminar a un destino en lugar de conducir
El exceso de peso en niños es una situación de salud pública sumamente alarmante. Por otro lado, algo positivo es que es un factor de riesgo modificable.
Manteniendo una dieta balanceada, e incorporando por lo menos 60 minutos de actividad física en la rutina diaria del niño podemos prevenir el sobrepeso u obesidad infantil y sus enfermedades asociadas.