Durante el embarazo y luego del nacimiento, los nutrientes que recibe el bebé dependen exclusivamente de la mamá. Cuando el feto está en el útero, los nutrientes llegan a través de la placenta y el cordón umbilical, después a través de la leche materna. De ahí que la nutrición de la madre sea un tema tan consultado por mujeres y especialistas.
Una de las preguntas más frecuentes se refiere a la nutrición que debe tener la mujer en su periodo de lactancia. Las dudas sobre los alimentos permitidos, las porciones y los horarios aumentan cuando la mamá comprende que el proceso de crecimiento de su bebé, recae en gran parte sobre ella.
Es vital que las madres lactantes adquieran hábitos saludables desde antes del nacimiento del bebé. En el caso de la nutrición, ésta debe ser balanceada entre todos los grupos alimenticios por dos motivos esenciales: para que el pequeño reciba los mejores nutrientes y para que la mamá no pierda las reservas de energía que necesita para cuidar de su bebé y proporcionarle cuidados de calidad.
Para las madres lactantes, resulta muy útil visitar a un nutricionista, cuya experiencia les dará la asesoría que necesitan y que se acomode a su estilo de vida. Por eso, presentamos los nutrientes que no pueden faltar en la dieta de una madre lactante.
Aumentar los alimentos ricos en calcio:
Este mineral es necesario para restituir las cantidades de calcio que se pierden cuando se alimenta al bebé. Si la madre lactante entrega todas sus reservas de calcio, sus huesos pierden fortaleza y estabilidad así que están más propensas a fracturas. Se recomienda comer espinacas y vegetales de hoja verde, frutos secos, leche, quesos y tofu.
Frutas y verduras en todas las comidas:
Las frutas y verduras aportan a la madre y al bebé todas las vitaminas, fibras y minerales que necesitan. Además, son un aporte considerable de ácido fólico, imprescindible durante el embarazo.
Carnes y grasas:
Los especialistas aconsejan el consumo de dos porciones de proteína diarias durante la lactancia. Así la madre mantiene sus niveles de energía y transmite a su hijo, elementos que estimulan su desarrollo y crecimiento. En cuanto a las grasas, lo ideal es que sean de origen natural pues aportan niveles más elevados de Omega 3 y 6, indispensables en el desarrollo neurológico y cardiovascular del niño.
En cuanto a la cantidad recomendada de alimentos, los nutricionistas y obstetras señalan que cada mujer lactante necesita 2.000 y 2.500 calorías diarias, comparables al consumo de uno o dos sánduches entre comidas. Lo importante es que cada madre lactante conozca su cuerpo para que acople su nutrición a esta etapa.